“Lo que para unos es alimento del cuerpo, para otros es alimento del alma

Con esta frase tan potente y con tanto significado nos resume Álvaro de Arespacochaga, Director Adjunto en la Fundación Pan y Peces, a quien entrevistamos, lo que es esta fundación. Fruto de las ilusiones de un grupo de cristianos que se reunieron en torno al Padre Javier Repullés S.J  para dicha causa, nació con la misión de ayudar a cientos de familias que están en riesgo de exclusión en la Comunidad de Madrid.

Sorprenden las cifras: hace 10 años trabajaban en 50 m2 y daban alimento a 20 familias, ahora ayudan a más de 800 y es uno de los bancos de alimentos más grandes de Madrid y de las que más comida en “carritos de la compra” proporciona en la capital.

 

  1. ¿Qué valores diríais que definen mejor a la Fundación Pan y Peces?

Proteger la dignidad, buen humor y cariño.

 

  1. ¿Qué nos podéis contar de vuestro fundador?

Javier Repullés, fundador y presidente, ha dedicado toda su vida a ayudar a los demás. Estuvo en la huelga de hambre del 0,7% en los años 90, cuya finalidad era conseguir que el Estado español destinara un porcentaje del PIB al desarrollo de los países más empobrecidos. Nuestro presidente aguantó 30 días sin comer y finalmente, debido al peligro que supuso para su salud, tuvo que parar.

Durante esos años, se dio cuenta que había un perfil de personas y familias que no eran pobres, pero tenían muchas dificultades y se encontraban en riesgo de exclusión social. Y así, en el año 2011, nació la Fundación Pan y Peces: “nosotros les ayudamos antes de llegar a un extremo más difícil y casi irreversible”.

 

  1. ¿Cuál es la misión principal de vuestra fundación? ¿En qué proyectos estáis trabajando ahora mismo?

Nuestra misión es evitar que las personas en riesgo de exclusión social lleguen a esa situación, centrándonos en la alimentación.

Ahora mismo estamos realizando un proyecto de comida a domicilio para familias que no se pueden desplazar hasta la fundación a recoger sus productos por situaciones de extrema gravedad. En la pandemia lo hacíamos con las 800 familias, pero no era factible continuar así por falta de medios.

La pandemia fue muy dura. Cierras de un día para otro, no puedes contactar con las personas y es casi imposible ayudarles. Tuvimos que coordinarnos con cientos de voluntarios para poder llevarles la comida a sus casas durante la parte más dura de la cuarentena. A raíz de esto, se planteó el servicio a domicilio para las personas que tienen situaciones con dificultades para venir hasta Pan y Peces, y llevar los “carritos de la compra” a sus casas. Nos sentimos realmente orgullosos de esta nueva forma de ayudar.

 

  1. ¿Qué te parece lo que ha planteado y ejecutado el Gobierno de Dinamarca en relación a exigir trabajos sociales a los inmigrantes para recibir ayudas?

Me parece muy bien. Sería una buena idea para implantar en España, pero lo veo un poco utópico y creo que a día de hoy sería inviable…

 

  1. ¿Con qué herramientas contáis para llevar a cabo el desarrollo de vuestro trabajo día a día y cómo se puede colaborar con vosotros?

Tenemos una aplicación web que nos permite proporcionar un servicio de citas para recoger los packs desde hace 4/5 años. Nos facilita mucho las cosas, es más ágil, tenemos más datos y los conseguimos más rápidamente.

Gracias a la agilidad que nos da esta aplicación podemos atender a las familias más rápido, de manera que pasan el menor tiempo posible en nuestro almacén de reparto. Esto contribuye a proteger su dignidad, menos tiempo haciendo cola significa menos tiempo “expuesto”.

 

  1. ¿Cuál diríais que ha supuesto uno de los mayores retos para vuestra fundación durante este año?

El inicio de la pandemia, sin duda, fue muy duro. El cambio de estructura de reparto y tener el equipo dividido hizo que fuera más difícil todo.

 

  1. Como Agencia de Marketing especializada en enfoques sostenibles ponemos en gran valor el compromiso con los ODS, ¿en cuáles os enfocáis específicamente?

Nos centramos principalmente en el ODS 1, el fin de la pobreza.

 

  1. ¿Cómo colaborar con vosotros?

En la web, a través de nuestro perfil de IG o por correo electrónico. Toda la información aquí.

 

  1. Si nos centramos en los ODS, ¿habéis notado que las empresas se han implicado más en ellos? ¿Ha habido algún incremento en los últimos años?

Sí, hay aumento. Las grandes empresas tienen concursos para diferentes ayudas y existe más concienciación en toda la sociedad. Esta predisposición se viene notando más en los últimos 10 años, pero desde 2018 se está dando mayor importancia.

 

  1. ¿Estáis teniendo más familias a las que ayudar a partir de la COVID-19?

Contamos con 24 citas en el sistema por semana que desde hace 10 años siempre hemos podido completar, pero, desde junio del presente año, no cubrimos todas. Lo achacábamos a las vacaciones, pero estamos en octubre y seguimos igual… Nos sorprende mucho y es una situación que nunca se había dado. Hoy en día, de hambre no se muere nadie en Madrid, hay muchos recursos como el nuestro, la solidaridad de las personas de nuestro entorno y la fraternidad que existe en la sociedad española hace que siempre haya alguien dispuesto a ayudar a los demás.

 

  1. ¿Qué requisitos tienen que tener las familias para recibir vuestra ayuda?

Tienen que venir derivados de servicios sociales, traer el padrón familiar y certificados de escolaridad en caso de tener niños que estén cursando educación obligatoria. Estos papeles son, además, renovados cada año. Nuestro servicio de ayuda tiene de duración máxima 2 años por familia, salvo para jubilados o casos de extrema gravedad. En cualquier caso, siempre contamos con la colaboración de los servicios sociales para saber si una familia necesita la ayuda o no.

 

  1. ¿Alguna frase que te guste e implantes en tu vida, Álvaro?

“No juzgar y ser estricto para ser justo”.